Noticias

GUÍA PARA ELABORAR ACEITES INFUSIONADOS: ACEITE DE ALBAHACA, ACEITE DE MARISCO Y ACEITE DE AJO

blank

El Aceite 1881 es un Aceite de Oliva Virgen Extra de altísima calidad y con un sabor y entidad propios. Es perfecto para todo tipo de elaboraciones, desde ensaladas hasta guisos pasando por fritos. Pero, ¿por qué no utilizar otros productos de gran calidad para obtener unos aceites infusionados y ampliar el abanico de opciones?

 

Ponemos sobre la mesa 3 propuestas bien distintas para que os sorprendáis a vosotros mismos, a vuestra familia o a los invitados en un día especial. El primero será un aceite de albahaca, muy fresco e intenso. El segundo, un aceite de mariscos, más denso y complejo, pero increíblemente aromático. El tercero un clásico como un aceite de ajos, pero al que le vamos a dar un toque especial que lo haga también diferente.

 

ACEITE DE ALBAHACA

La albahaca es una hierba aromática y un clásico para acompañar distintas pastas. Su aroma es único y resulta muy atractivo, así que resulta perfecta para infusionar con nuestro Aceite 1881.

 

Así que vamos a comprar un par de ramilletes de albahaca fresca y las deshojamos, quedándonos únicamente con las hojas sin el tallo. Prepararemos un cazo donde pondremos agua a hervir y un cuenco con agua fría con hielo y un chorrito de limón. Cuando el agua hierva, echaremos nuestra albahaca y la dejaremos unos 20-30 segundos. Rápidamente rescataremos las hojas y las echaremos en el cuenco con agua fría para cortar la cocción.

Con este pequeño truco llamado blanqueado vamos a ayudar a que el color verde brillante se conserve mejor y se quede en el Aceite de Oliva Virgen Extra.  ¿Cómo lo haremos? Muy fácil: trituraremos la albahaca junto a nuestro Aceite 1881. ¿Las cantidades? Os recomendamos que el Aceite de Oliva Virgen Extra llegue a la mitad del volumen de la albahaca.

 

Cuando esté todo perfectamente triturado (¡ojo, si usáis un robot de cocina, que no se caliente el recipiente demasiado!) lo colaremos con una estameña o un colador muy fino y lo guardaremos en un recipiente adecuado.

 

Este Aceite de Oliva Virgen Extra infusionado irá perfecto para, por ejemplo, una ensalada de tomate y mozzarella o para un plato de pasta.

 

ACEITE DE MARISCOS

El marisco es puro umami (suculento, el quinto sabor tras dulce, salado, amargo y ácido) y eso lo hace un producto maravilloso con el que infusionar un Aceite de Oliva Virgen Extra de la calidad del Aceite 1881.

 

¿Qué necesitamos para esta infusión? Pues lo ideal sería aprovechar el marisco de otra elaboración para aprovechar las cáscaras. ¿Vais a preparar una paella con gambas y langostinos? Pues guardad las cabezas y cáscaras y vamos a ponernos manos a la obra.

Calentad una olla a fuego medio-fuerte (7-8) con un chorrito de Aceite de Oliva Virgen Extra y poned todas las carcasas y cabezas y salteadlas para que se doren, moviéndolas cada poco tiempo. Una vez estén doradas (cuidado de no quemarlas), bajad el fuego (2-3 en vitrocerámica) y cubridlas con Aceite 1881. Ahí estarán confitándose durante 1 hora. Pasado ese tiempo, apagad el fuego y dejad que se enfríe. Una vez frío, coladlo en un recipiente sin que quede ninguna cáscara.

 

¿Alguna idea para utilizarlo? Para una pasta marinera, para darle un toque adicional a un pescado a la plancha o para aliñar unas papas con unas gambas.

 

ACEITE DE AJOS ASADOS

El ajo es uno de los ingredientes más importantes de la cocina española. En muchas casas es habitual encontrar un bote con Aceite de Oliva Virgen Extra con cabezas de ajo, y aunque efectivo, no es nada diferencial. Por este motivo os proponemos infusionar nuestro Aceite 1881 con cabezas de ajo… asadas.

 

El ajo asado realza los matices y modifica su aroma, otorgándole un punto más dulce que el ajo crudo. Es también más delicado, por eso vamos a utilizar tanto ajo asado como dientes de ajo crudos.

 

Asaremos primero 2 cabezas de ajo de buen tamaño o 4 si son cabezas pequeñas. Lo haremos envolviéndolas individualmente en papel de aluminio junto a un chorrito de Aceite 1881 y una pizca de sal. El horno lo precalentaremos a 180 grados y los ajos estarán dentro unos 45 minutos. Si pasado ese tiempo el ajo ya está blando, lo sacaremos y si no, lo dejaremos 15 minutos más.

 

Aquí el proceso es similar al que hemos hecho con el marisco: cortaremos por la mitad las cabezas de ajo y las pondremos en un cazo con varios dientes de ajo crudos cubriéndolo todo con Aceite de Oliva Virgen Extra a baja temperatura (2-3 en vitrocerámica) durante una hora. Cuando pase el tiempo, apagaremos el fuego y dejaremos enfriar. Quitaremos las cabezas de ajo y colaremos. Los dientes crudos de ajo los dejaremos con el Aceite de Oliva Virgen Extra infusionado en el recipiente que elijamos.

 

Este Aceite 1881 de ajo se podrá utilizar tanto para un aliño, para una tostada para el desayuno o para guisar. No os defraudará.